Siempre fui una niña bastante inquieta, no jugaba a las muñecas, ni a la cocinita, yo prefería estar en la plaza de enfrente de casa saltando entre los juegos de caño o jugar mancha arena, jugar beisball con los chicos del edificio, siempre me divertía mas con los varones (ahora también). En el año 1985 mi viejo me trae de EE UU un par de patines botitas de Chicago Bull´s los amaba no me los sacaba nunca lo único que hacia era patinar todas las tardes y todo el fin de semana, horas y horas, tenia las rodillas raspadas siempre, pero no me detenía, hasta que en el 87 ya por mas que intentara las botas no me entraban mas…..había crecido!!!!. Ahora los chicos y chicas iban a los asaltos, jugaban al semáforo, pero a mi no me interesaba, prefería estar con mis hermanos, andar en bici, escuchar radio y bailar sola en mi cuarto, decorarlo con recortes de diarios, hacer la copa y hablar con mi abuelo. Siempre me gustaron los juegos, siempre me gusta ganar, así que le pedí a mi abuela que me enseñe todo sobre las barajas, le salí bastante buena!!
En el 86 mi mami me deja ir un finde a la quinta de una amiga, estábamos subidas a un árbol, estaba ya oscureciendo, cuando la mamá de A.J. Montiel nos llama a comer, bajamos rápido y yo me engancho la boca con un alambre de púas, obvio mucha sangre, en el medio de la nada, me pusieron la piel en su lugar y querida bancatelá y dormite así, pobre mami cuando me vio al otro día se puso a llorar. No me bastó con eso, a los pocos meses estaba saltando en una rueda de camión que habían puesto como protección de un pequeño arbolito, me caí y me atravesé un clavo oxidado en la mano, me lo saqué yo y no le dije a mi mamá por las dudas, suerte que tenía todas las vacunas.
Para ese entonces ya había salido 3 años seguidos la reina de la primavera en el cole, así coseche muchas enemigas, de hecho me han esperado en el baño y me cagaron a patadas, me arrancaron mechones de pelo, entre cinco, esta especie de envidia siguió en mi adolescencia, hasta que por fin me mude, al pasar los años me enteré de que varias de esas personas hoy tienen una vida infeliz y dos ya no están para contar el cuento, pobres!!!
En 1988 empiezo la secundaria en un liceo de señoritas, ahí hago muchas amigas todas de promedio 10 como yo, nos juntábamos los domingos en Corrientes y Cerrito y nos íbamos al
McDonald's y a Sacoa. En ese verano 87/88 mis viejos habían alquilado una casa en Aguas Verdes, donde conocí a mi primer amor, así que lo único que pensaba era que llegue el verano de una vez para verlo pasar en su moto amarilla.
Para mediados del ´88 una amiga del barrio me invita a bailar a City Hall a la tarde, incursiono en los hábitos masivos y me empieza a gustar, me pongo por primera vez de novia con L.H Yrigoyen dura un suspiro (3 meses), o sea
aprendí a besar. Empiezo a ir a cumpleaños de 15, mi amiga del alma y compañera de aventuras C. Roca, me invita al de ella y desde ahí en mas hasta ahora seguimos sin separarnos.
A fin de año me llevo dos materias, así que en Diciembre estaba rindiendo, al finalizar el examen salí del liceo y mi flia estaba en la puerta esperándome con las valijas preparadas para irnos a la costa hasta Marzo, costumbre que siguió por años... Pero ese año y todos los que le siguieron me llevaba a mi amiga C.R.
Nos divertíamos a lo loco. No se le ocurre a mi viejo comprarme una Zanella, éramos imparables, amigas de todo el mundo masculino, ella era como, yo por fin había encontrado una amiga interesante y copada. Escuchábamos los Fabulosos Cadillacs (que
aun hoy los escuchamos cantar...), jugábamos al pool y salíamos a coquetear, sin darle bola a nadie, pero yo internamente moría por M.H.F el de la moto amarilla...
Nunca me animé a decírselo. Ahhh!!! medano 14, nuestros paseos por la playa en moto!
Para cuando volvimos, nos comíamos el mundo claro.
Andábamos en skate en las ollas de Munro, parábamos en Flores, en Tarot, salíamos a bailar a todos lados, pero a la tarde, a las 12 de la noche tenía que estar en casa sino mi vieja no me dejaba quedarme a dormir en lo de C.
Un día decidimos ratearnos. Nos fuimos al museo de comunicaciones en costanera sur, luego volvimos al cole y adivinen quien estaba esperándome para invitarme a almorzar al centro?: mi vieja!!!! Cuando me preguntó a donde me había ido y le expliqué casi se muere de risa, yo nunca les mentía a mis viejos, ahora tampoco...
Después de eso, empezamos a ir a visitar a mi viejo al barco, nos encantaba ir a la sala de maquinas, a los camarotes, subir esa planchada con el río asqueroso debajo, y tambalearnos de un lado a otro,
el olor del barco es tan especial que aun no sabría como describirlo.Ese año ´89 empecé a fumar...Marlboros box.
despues sigo...